Desde hace más de medio siglo, nuestra historia se teje con hilo, esfuerzo y familia. Lo que comenzó como un pequeño taller de trajes a medida, chaquetas y pantalones de trabajo, se convirtió en uno de los pilares de la confección nacional.
El origen de Yorklay se remonta a una generación anterior, cuando el hermano de mi abuelo comenzó con un taller de confección artesanal. Años después, mi padre retomó el legado familiar tras la pérdida de su padre, convirtiéndose en el motor que impulsó nuestro crecimiento.
Durante los años de mayor expansión industrial en España, llegamos a operar con varios talleres y más de 500 personas en plantilla. Fabricábamos para grandes almacenes, marcas internacionales y entidades públicas, manteniendo siempre el control y la calidad en cada prenda.
Con la apertura de China al mercado global, muchos fabricantes europeos tuvieron que reinventarse. En nuestro caso, redujimos capacidad, pero no perdimos el compromiso. Hoy seguimos siendo uno de los talleres más relevantes de España, adaptándonos a nuevas marcas, materiales técnicos y demandas logísticas.
Comienzan a fabricarse chaquetas, trajes y ropa de trabajo en un pequeño taller familiar impulsado por el hermano del abuelo.
Tras el fallecimiento de su padre, mi padre vuelve para liderar la empresa familiar y asegurar su continuidad.
Se consolidan varios talleres en distintas zonas de España, con más de 500 empleados produciendo para grandes marcas, almacenes y el sector público.
La apertura de China al mercado internacional y nuevas dinámicas de producción impactan al sector textil europeo.
Adaptación a nuevos materiales técnicos, producción más eficiente y servicios integrados de fulfillment B2B2C en España y Europa.